El domingo por la noche, un avión de pasajeros se estrelló en las montañas de la provincia de Badajsán, en el noreste de Afganistán, causando la muerte de al menos seis personas. El aparato era un Falcon 10, un jet privado de fabricación francesa, que realizaba un vuelo chárter entre India, Uzbekistán y Rusia. Las autoridades talibanes, que controlan la zona, han confirmado el siniestro y han enviado un equipo de rescate al lugar de los hechos. Estas son las principales claves del suceso:
¿Qué pasó?
Según la Agencia Federal de Transporte Aéreo de Rusia (Rosaviatsiya), el avión despegó del aeropuerto de Gaya, en India, a las 17:35 hora local, con destino a Tashkent, la capital de Uzbekistán. A bordo iban cuatro tripulantes y dos pasajeros, todos de nacionalidad rusa. El avión tenía previsto hacer una escala técnica en Tashkent y luego continuar su ruta hasta el aeropuerto de Zhukovsky, cerca de Moscú.
Sin embargo, el avión nunca llegó a su destino. A las 19:40 hora local, cuando sobrevolaba el espacio aéreo de Afganistán, el avión perdió el contacto con los controladores aéreos y desapareció del radar. Poco después, se confirmó que el avión se había estrellado en el área de Tupkhana, en el distrito de Zebak, una zona montañosa y de difícil acceso en la provincia de Badajsán.
¿Qué causó el accidente?
Las causas del accidente aún no están claras y se están investigando. Según algunas fuentes, el avión pudo haber sufrido un fallo técnico o una avería en el motor, lo que le habría obligado a intentar un aterrizaje de emergencia. Otras fuentes apuntan a que el avión pudo haber sido derribado por un misil o un ataque aéreo, ya que la zona donde se produjo el siniestro es un foco de conflicto entre los talibanes y las fuerzas gubernamentales.
El portavoz de los talibanes, Zabiulá Amiri, ha negado cualquier responsabilidad en el accidente y ha asegurado que el avión no fue atacado por sus combatientes. Amiri ha dicho que el avión se estrelló por las malas condiciones meteorológicas y la falta de visibilidad en la zona. Según Amiri, el avión se incendió tras el impacto y quedó totalmente destruido.
¿Hay supervivientes?
Lamentablemente, no hay supervivientes del accidente. Según el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, los seis ocupantes del avión fallecieron en el acto. El ministerio ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas y ha ofrecido su colaboración a las autoridades afganas para esclarecer las circunstancias del suceso.
El equipo de rescate enviado por los talibanes ha llegado al lugar del accidente y ha recuperado los restos del avión y los cuerpos de las víctimas. Según Amiri, los cadáveres serán entregados a las autoridades rusas lo antes posible.
¿Qué consecuencias tiene el accidente?
El accidente de avión de pasajeros en Badajsán es uno de los más graves ocurridos en Afganistán en los últimos años. El país asiático tiene un historial de accidentes aéreos debido a la inestabilidad política, la falta de infraestructuras, la escasa regulación y el clima extremo.
Además, el accidente pone de relieve la situación de inseguridad que vive el país tras la retirada de las tropas estadounidenses y la toma del poder por parte de los talibanes.
El accidente también afecta a las relaciones entre Rusia y Afganistán, dos países que mantienen una cooperación estratégica en materia de seguridad y defensa. Rusia ha sido uno de los pocos países que ha reconocido al gobierno talibán y ha mantenido contactos con sus líderes. Sin embargo, el accidente podría generar tensiones y desconfianza entre ambas partes, especialmente si se demuestra que el avión fue derribado intencionadamente.